Archivo de la categoría: Guatemala

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…quizá lo hemos entendido mal y cada uno de nosotros debemos completarlo con nuestro diario vivir. Por cada No Se Puede que escuches, completa la frase…

No Se Puede Dejar de Soñar…

No Se Puede Dejar de Luchar…

No Se Puede Dejar de Trabajar….

No Se Puede Dejar de Ser Feliz…

Nosotros somos el cambio…

Guatemala, el país de No Se Puede…

Siga adelante Ricardo…

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…el día de ayer leía su respuesta a los críticos que se han encargado, una vez más, de lapidarlo con las sandeces de sus palabras y críticas amargas, que más parecen, como usted bien dice, por encargo de algunos otros a quienes sirven. Parafraseando al Manco de Lepanto, si los perros ladran es porque estamos avanzando. Quizá después de todo lo menos que se espera es que una persona que ha tenido éxito y se ha destacado, dentro de nuestra limitada sociedad, ya sea por falta de oportunidades, o bien por el miedo al fracaso, que es lo que más abunda en la clase acomodada del país, el miedo a atreverse a romperse la cara, en una sociedad que más que conservadora es hipócrita y revanchista. Usted con mucho esfuerzo y sacrificios tomó sus maletas y fue a probar suerte, pero más que suerte, fue a trabajar para construirse ese futuro que un día fue su ideal, su sueño, y hoy día es su presente. Más que pensar que si soy un fan suyo, quizá algunas canciones me gusten más que otras, pero lejos de que lo admire como artista, lo admiro como persona, y sobretodo porque aunque usted no lo haya querido, usted lleva en sus hombros el estandarte que es este país si se pueden lograr los sueños, quizá por eso muchas personas lo sentimos íntimo y nos atrevemos a tutearlo en ocasiones, cuando nos llenamos de orgullo, al verle a usted llevar la frente en alto y poner la nota positiva y buena en nuestra sociedad y quizá llenar de luminarias los periódicos e informativos, casi todos sensacionalistas y poco serios, de este pequeño país. Que si fue una marca de refrescos la que lo apoyó en su campaña, que si es vendido, que si es juana o chana, es lo de menos, al menos estas personas al igual que usted tomaron el riesgo y de la mano de su arte, nos muestran la cara bella del país, lo que nos hace sentirnos orgullosos y nos da un respiro, ante la burda y cruenta realidad que nos tiene sumida la época de la postguerra, y en la cual pareciera que los oscuros personajes de «la aristrocracia» guatemalteca nos ha sumido, como si fuesen los señores de la guerra del hoy triste país de Afganistán. Cuando todos estos empresarios y gente bien del país no se ha atrevido siquiera a invertir en sus colaboradores, evaden los impuestos que les corresponden y se ofenden cuando alguien fuera de su círculo empieza a despuntar. Como antes le decía, quizá usted nunca pensó en tener la responsabilidad del autoestima de los guatemaltecos, pero hoy día, usted es de los pocos que quiere hacerlo, por eso siga adelante Ricardo, un fraternal abrazo paisano.

Extrañando a Ubico…

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…me quedé pensando el día de ayer, al ver como se comportaban jóvenes de ambos sexos, entre 15 y 17 años, bebiendo y fumando, con el auto estacionando al lado del parque de la Antigua Guatemala. Los improperios y sandeces, que se proferían unos a otros, a manera de saludo y la violencia con la que se relacionaban, me hizo pensar acerca de mi propia adolescencia, quizá fue igual de difícil, quizá el hecho de querer encajar y no lograrlo hacía que nos relacionaramos con esa violencia primitiva, así como una tribu, en busca de un mamut que cazar, por el hecho de demostrar que éramos más fuertes que los otros. Luego también pensé en las palabras de mis padres y la forma como ellos entendían la vida en ese momento, y que como me fueron encauzando desde niño hacia una vida fundada en los valores, y la corrección a tiempo, ya que tantas veces que se desvío mi criterio y con sus consejos y atenciones allí me trajeron de vuelta a la senda que hoy camino. Luego pensé, que quizá era muy dramático extrañar a Ubico, mientras buscaba dentro de mi racionalidad, ¿por qué lo había mencionado?. Sí ni siquiera lo conocí, y muy lejos de ser partidario de él o no. Quizá fue un acto reflejo de la mente, al recordar a los contemporáneos de mis abuelos, quienes decían que en el Tiempo de Ubico, todo era mejor. Había seguridad, los jóvenes trabajan y respetaban las reglas, los presos construían carreteras y no había necesidad de infringir la ley. Por un momento también pensé en aquella colección de cuentos «Extrañando a Kissinger», de Edgar Keret. Y luego también dije que debía escribir un cuento con el nombre de esta reseña. Me quedé pensando tanto tiempo, que cuando volví al parque de Antigua, los adolescentes ya habían partido. Me puse a pensar cual sería la reacción de la gente al leer el título «Extrañando a Ubico»,  quizá me llamarán retrograda, fascista y tantos descalificativos, sin siquiera leer lo que escribí, con artículos y opiniones incendiarias pedirán mi cabeza y me quemarán vivo, a la vieja usanza de la inquisición. Luego me reí, al saber que muy pocos lo leerán y de los que lean el título quizá el 1% lea lo que escribí, por lo que nuevamente guardé la idea en mi mente y regresé a casa. Esta mañana al estar trabajando en el taller de la casa, esta idea me seguía martillando las sienes y reflexioné mi idea. Tristemente me topé con la realidad de que aún existe en nuestro inconsciente colectivo guatemalteco la idea que un personaje del pasado era mejor, seguramente porque no habían tantas expectativas ni ideas progresistas ni igualitarias como ahora. La convención de los derechos universales del hombre, no había sido promulgada y los ancestros tuvieron que tragar con saliva lo que había. Asimismo, como la apatía que impera en todo el país de la eterna primavera, donde todos queremos que la situación cambie, pero ninguno estamos dispuestos a ceder ni sacrificarnos, estamos muy cómodos viendo desde nuestra mecedora viendo como se ha caído a pedazos el país y allí seguimos esperando que venga alguien más y lo haga, a su mejor entender y saber, de acuerdo a su visión y nosotros simplemente salir en la foto abrazados, porque la selección de fútbol asista a un mundial, o esperando que vuelva a venir Shakira y el Buki, es tan penosa la situación de la falta de liderazgo que si lanzamos a estos dos personajes para la presidencia del país, quedan por mayoría absoluta, al son de las caderas de la señorita colombiana. Por lo que se me hizo fácil pensar en tantas razones porque nuestro inconsciente colectivo aún extraña a esos gobiernos militares totalitaristas, quizá es cierto que habían «valores», aunque me atrevo a pensar que no era por convicción, sino por miedo. Quizá ese miedo aún impera en nuestra sociedad, y hoy por hoy, le tememos a los grupos de narcotraficantes, secuestradores, criminales y asesinos, que han desolado nuestro bello país. Aunque creo que lo más preocupante es que como sociedad, en pleno siglo xxi, donde existe una apertura social más grande, con los grandes avances tecnológicos de la ciencia, en Guatemala, no seamos capaces de crear un proyecto de nación, de ponernos de acuerdo que es lo que vamos a hacer con este pedazo de tierra donde nacimos y que muchos amamos y queremos que cambie. Así como que no es posible, que en lugar de avanzar para ser una sociedad más justa, equitativa, con igualdad de oportunidades para todos; estemos inmersos en una guerra contra la criminalidad, donde la sociedad civil ha tenido que tomar el rol del inexistente gobierno y defenderse como pueda. Cosa que deriva en varios factores, donde uno de ellos es la escasa difusión de los valores universales, lejos de cualquier credo, y cerca del humanismo, esos valores que han permitido a países desarrollados y otros bastante más adelantados que Guatemala en el rubro de la vía del desarrollo. Como lo son la honestidad, la integridad, el trabajo, el respeto. Y que lastimosamente, muchos de los jóvenes de hoy, que se ven inmersos en la transculturización cada vez más lacerante, no vean agradable tener respeto por si mismos, ni por otros, no vale la pena estudiar ni trabajar, porque un narcotraficante o bien un criminal, gana más dinero que alguien que es h0nesto, y lo más triste es que se le celebre y se le premie. Así como la falta de líderes que realmente representen a las personas, que quieran un cambio real, con una propuesta realista y que sobretodo la ejecuten, por lo que lastimosamente mientras siento cada una de mis falanges martillando el teclado, como queriendo despertar la apatía de mis compatriotas y cierro los ojos, negando con la cabeza, pienso que en Guatemala nuestro mayor problema es que vivimos «Extrañando a Ubico»…

Quizá hoy sea el principio del fin…(en relación a España 15M)

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…pensaba esta mañana luego de leer las noticias, mientras jocosamente me reía de la predicción que hoy 21 de mayo del 2011 será el fin del mundo, luego desayuné, mientras conversaba con mi madre sobre temas que nos interesan y lo que más esperamos en nuestra familia, que llegué el pequeño Eduardo a nuestra vida para verle crecer y tener una alegría más en la vida, leí con cierto desdén las noticias de ayer y la semana, las brutalidades ocurridas en Guatemala, ese salvajismo en el que estamos inmersos, sin que parezca que se pueda hacer algo, al menos de parte de las autoridades y políticos involucrados, en todas aquellas personas que con un simple movimiento podrían hacer un cambio significativo, leí la columna de una periodista que comentaba, la triste realidad, del presidente inombrable, inepto, inútil, cobarde y falto de carácter, entre tantos descalificativos que vienen a mi mente en este momento, y donde así como ella explicaba, parafraseando al maestro Samuel Becket, en Esperando a Godot, una obra genial del teatro del absurdo, este ignomio personaje, hoy presidente, «espera el tiempo adecuado» para actuar, como si no fuese suficiente que el país es un completo caos, al borde del colapso, simplemente indignante, por lo que pensé en las manifestantes de los indignados en España y como poco a poco esa resistencia pacífica se va propagando a lo largo del mundo, mientras pensé que tristemente en un país como el mío, Guatemala, el lugar donde nací, no podríamos ni siquiera indignarnos, quizá porque la mayoría no entiende ni siquiera de que estamos hablando, y no es porque nunca hayan tenido acceso al maravilloso ensayo «Indignaos» de Hessel, sino porque ya la apatía y el desgano nos ha sobrepasado como sociedad y donde cada uno vemos como salímos avante con nuestros propios medios, es triste y preocupante saber que la mayoría de la «élite» intelectual del país, aquellos colegas míos universitarios o con grados académicos avalados por alguna casa superior de estudios, llamada «Universidad» no quieran leer con sus propios ojos, los manifiestos, y están tan ocupados creando «riqueza» que le piden a uno hacerles una sinopsis, por lo que una persona astuta y bandida podría a su conveniencia manipularles, quizá ese problema sea el mayúsculo en este país, que las personas ya no quieren pensar y que todo lo quieren tener como por arte de magia, así como presionar un botón y listo, quizá estos hijos de la comida rápida y de lo quiero ahora o grito, sea lo que las élites de los círculos que dominan el mundo, hayan buscado para no tener resistencia y así fácilmente dominar el mundo, a un estilo matrix o bien un mundo feliz de Huxley, quizá después de todo no estamos tan distantes de esa realidad virtual o realidad realidad, que nuestra vida cotidiana sea realmente esa obra de teatro del absurdo, donde cada uno tomemos nuestro rol y noche con noche volvamos al camerino y por las mañanas, luego del maquillaje nuevamente a las tablas, no sé si esto realmente sea una manera de vivir en estos tiempos en que nos ha tocado vivir, si sea la misma corriente o bien es la forma como un ente malévolo lo ha diseñado y no podemos salir de la rueda del hamster, donde corremos cada día más rápido para ir a ningún lugar, pero estamos tan enchufados a la vida virtual que sentimos que si lo hacemos, quizá por eso decidí hace dos días que debía volver al bosque, a ese remanso de los árboles donde me siento bajo ellos y me quedo allí en paz, quizá después de todo hoy día sea el principio del fin, de esta sociedad donde estamos sumergidos hoy, donde cada día se siente que se está al borde del colapso, porque ya no se puede malvivir así, quizá sea necesario un cambio estructural en la humanidad, para realmente poder vivir en estos tiempos, quizá seamos esa generación que tenemos la posibilidad de hacer los cambios y no perdernos entre los vericuetos del hedonismo, es tiempo de hacer algo y debemos hacerlo, por lo que después de todo quizá si es el inicio del fin de esta estructura obsoleta, que lo único que nos ha mostrado es lo temibles que podemos ser como humanos, cuando peleamos por el dinero y el poder, quizá si no existiese el dinero todo sería más justo, quizá fuera peor, pero realmente debemos entender que no es a través de la violencia que podemos hacer los cambios, ya que si bien aunque yo tenga diferencias de vida y este en las antípodas de personas que no comparten mi punto de vista y mi manera de ser, la cual creo que es buena para mí y donde trabajo y soy honesto, ni siquiera de esa manera podría yo justificar matar a alguien porque es criminal y es deshonesto, de nada serviría tomar la justicia en mis manos y anteponer una visión parcializada de mi vida, basada en los conceptos y valores que me han inculcado, quizá después de todo, todos somos necesarios para sacar adelante a la humanidad, y debemos seguir, sin olvidar que las diferencias que existen entre todos los seres humanos son lo que nos hacen únicos y brindan la oportunidad de sacar lo mejor y seguir adelante, mientras tanto el día de hoy estoy Indignado y desde esta montaña, donde vivo, les mando mi apoyo a esos jóvenes y no tan jóvenes que se manifiestan en España, deseando que esto se propague en este lugar donde vivo y donde sea necesario, para poner un alto a los abusos de clases dominantes que piensan que son los dueños del mundo, que son dueños del sistema y que nosotros somos simples ordenadores enchufados al sistema que pueden encender y apagar a su antojo…

Guatemala nos necesita…

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…es tiempo de colaborar con nuestros paisanos que han sufrido por los desastres naturales causados por la erupción del volcán de Pacaya y la tormenta tropical Agatha, hay miles de damnificados, evacuados de sus hogares, personas desaparecidas, personas sin abrigo ni comida. Es tiempo que los que podamos ayudemos con lo que sea nuestra posibilidad, hay muchas maneras de ayudar, desde recaudar fondos, víveres, ropa, los cuales se pueden trasladar a los centros de acopio puestos por diversas instituciones. Así como trabajo voluntario, trabajando con las cuadrillas de personas que están recogiendo los escombros. Guatemala te necesita y tu puedes ayudarla de alguna manera.